El espejo mágico

Ultimamente estoy muy flojo para escribir. En realidad es que no me apetece. Es una vagancia más mental que física.

Hoy, al igual que en alguna otra ocasión, me vais a permitir referenciar una reflexión que considero digna de compartir con vosotros. Ciertamente enriquecedora, tanto por el fondo como por la forma (lo reconozco publicamente, envidio la extensión de tu vocabulario).

El post se llama "La razón y la tribu". No estoy muy positivo, así que la conclusión tampoco lo es: tras una brevisimo paso por lo que creía un ataque de anarquismo, he caido en la cuenta de que, cada día que pasa, me siento más próximo al nihilismo (Negación de todo principio religioso, político y social).

Aviva también en mi "imaginación" el agradable recuerdo de la revolución (aunque quizás sólo fuese rebeldía). Aquel 8-12-80 a todos nos mataron un poquito junto a él.

Espero leerte más a menudo y, de vez en cuando, te pediré prestado el espejo.

Cuidate mucho, hermano.